¿QUIEN CREO EL ESPACIO Y EL TIEMPO?

 

QUIEN HIZO EL ESPACIO Y EL TIEMPO

 

 

¿quién concibió a todo lo que existe?

 

El ser superior, el ente superior al hombre, ¿existe? ese ser que sólo él concibe todas las cosas, la realidad, la sensoriedad, bajo la forma de objeto o de ser o especie que tiene existencia, como actividad sensorial humana, existe esa fuerza sobrenatural, ese fenómeno omnipotente, ser omnipotente, omnisciente y omnipresente, ¿existe ese ser pluripotente?  

 

Concebir, es dar a luz, parir, hacer.  ¿quién hizo el tiempo y el espacio?

 

Desde luego que hago esta pregunta muy en serio, no pienso en ningún dios; no al menos de los que nos han mencionado en la literatura, mitología, y en la religión, como materia de estudio de filosofía o en la biblia. no.

 

No conocer la actividad real, sensorial, del ser en sí mismo, es dejar de ser el ser, es negarle a la ciencia, a la razón humana, una explicación científica, real, verdadera, cognoscible. la experimentación científica concibe la propia actividad humana como una actividad objetiva.

 

Otorgar poderes a un ser que no existe, es crear una abstracción de la nada.

 

El ser humano solo puede crear abstracciones después de haber dado algunos pasos previos desde la observación y la experimentación hasta la comprobación del resultado, recién allí puede decir que ha realizado una abstracción.

 

¿pero, quién crea el tiempo y el espacio?

 

no me digan que fue dios o jehova, yave, o zeus. [mito].

 

no me digan que fue el sol, o una lluvia de planetas. [mito].

 

no me digan que este escrito en la biblia. [mito].

 

nadie lo sabe.

 

nadie.

 

El problema planteado no es sobre el pensamiento humano, la cuestión no es si al pensamiento humano se le puede atribuir una verdad objetiva, no es un problema teórico, sino un problema práctico.

 

La teoría materialista de que los hombres son producto de las circunstancias y de la educación, se quedó corta, ni siquiera es la mitad de lo que debió realizar, su objetivo, un verdadero trabajo humanístico, dignificar a la dignidad humana.

 

El ser humano practica la autoenajenación religiosa del mundo religioso, imaginario, aun viviendo en otro real.

 

El ser humano, vive en el planeta tierra y su mente y pensamiento vive en mundo imaginario.

 

El ser humano se refugia siempre en cuevas, paredes, barreras, escudos, trincheras, muros, puertas, etc.… por seguridad, para protegerse de algo o de alguien, por miedo. siempre lo hizo.

 

Pero, en el ser humano, no solo que el pensamiento es abstracto, apela a la contemplación sensorial, a la percepción, a la razón, al entendimiento, a la concepción lógica de las características de las cosas, a la observación, experimentación, comparación, generalización y abstracción, dar a luz a los conceptos.

 

La sensoriedad a través de los órganos de los sentidos, propio de todo ser humano normal, se debe concebir, lo cual “no” hacen los “pensadores” como una actividad sensorial humana práctica.

 

La esencia humana es real, no es algo abstracto, ambos aspectos son inherentes a cada individuo como ser social. sobre la esencia. la vida social es, en esencia, práctica.

 

Todos los misterios del tiempo y espacio, que, por lo general por debilidad humana, por las emociones humanas, que hacen débil al ser humano, descarrían todas las teorías hacia el misticismo, [mitología] encuentran su solución racional en la práctica humana y en la comprensión de esa práctica.

 

Los filósofos no han hecho más que interpretar de diversos modos el mundo real. pero ninguno ha resuelto la pregunta, ¿quién hizo el tiempo y el espacio?

 

¿será un ser omnipotente, omnisciente y omnipresente totipotente, pluripotente y multipotente del tiempo y del espacio?

 

Al insistir de mi parte, que no me digan que fue DIOS, o JEHOVA, tiene un único propósito, quitar ese argumento “humano”, y permitir una respuesta distinta, quedarnos solo en lo real.  Quedarnos en la realidad significa encontrar la verdad. Pero no una verdad descarriada. Sin olvidar que el ser humano es materialista e idealista.

 

El término de «Verkehr» (trato) en "La Ideología Alemana" tiene un contenido muy amplio. Incluye la comunicación material y espiritual de individuos, grupos sociales y países enteros. Marx y Engels muestran en su obra que el trato material entre las personas, sobre todo en el proceso de producción, es la base de todo otro trato. En los términos Verkehrsform, Verkehrsweise, Verkehrsverhältnisse, Produktions- und Verkehrsverhältnisse («forma de trato», «modo de trato», «relaciones de trato», «relaciones de producción y trato»), que se usan en la "Ideología Alemana", encontró expresión el concepto de relaciones de producción que, por entonces, Marx y Engels tenían en proceso de formación.

 

La producción de las ideas, las representaciones y la conciencia aparece, al principio, directamente entrelazada con la actividad material y el trato material de los hombres, como el lenguaje de la vida real. La formación de las ideas, el pensamiento, el trato espiritual de los hombres se presentan aquí todavía como emanación directa de su comportamiento material. Y lo mismo ocurre con la producción espiritual, tal y como se manifiesta en el lenguaje de la política, de las leyes, de la moral, de la religión, de la metafísica, etc., de un pueblo. Los hombres son los productores de sus representaciones, de sus ideas, etc., pero se trata de hombres reales y activos tal y como se hallan condicionados por un determinado desarrollo de sus fuerzas productivas y por el trato que a él corresponde, hasta llegar a sus formas más lejanas. La conciencia [das Bewusstsein] jamás puede ser otra cosa que el ser consciente [das bewusste Sein], y el ser de los hombres es su proceso de vida real. Y si en toda la ideología, los hombres y sus relaciones aparecen invertidos como en la cámara oscura, este fenómeno proviene igualmente de su proceso histórico de vida, como la inversión de los objetos al proyectarse sobre la retina proviene de su proceso de vida directamente físico.

 

Totalmente al contrario de lo que ocurre en la filosofía alemana, que desciende del cielo sobre la tierra, aquí se asciende de la tierra al cielo. Es decir, no se parte de lo que los hombres dicen, se representan o se imaginan, ni tampoco del hombre predicado, pensado, representado o imaginado, para llegar, arrancando de aquí, al hombre de carne y hueso; se parte del hombre que realmente actúa y, arrancando de su proceso de vida real, se expone también el desarrollo de los reflejos ideológicos y de los ecos de este proceso de vida. También las formaciones nebulosas que se condensan en el cerebro de los hombres son sublimaciones necesarias de su proceso material de vida, proceso empíricamente registrable y ligado a condiciones materiales. La moral, la religión, la metafísica y cualquier otra ideología y las formas de conciencia que a ellos correspondan pierden, así, la apariencia de su propia sustantividad. No tienen su propia historia ni su propio desarrollo, sino que los hombres que desarrollan su producción material y su trato material cambian también, al cambiar esta realidad, su pensamiento y los productos de su pensamiento. No es la conciencia la que determina la vida, sino la vida la que determina la conciencia. Desde el primer punto de vista, se parte de la conciencia como si fuera un individuo viviente; desde el segundo punto de vista, que es el que corresponde a la vida real, se parte del mismo individuo real viviente y se considera la conciencia solamente como su conciencia.

 

Y este modo de considerar las cosas posee sus premisas. Parte de las condicionas reales y no las pierde de vista ni por un momento. Sus premisas son los hombres, pero no tomados en un aislamiento y rigidez fantástica, sino en su proceso de desarrollo real y empíricamente registrable, bajo la acción de determinadas condiciones. En cuanto se expone este proceso activo de vida, la historia deja de ser una colección de hechos muertos, como lo es para los empíricos, todavía abstractos, o una acción imaginaria de sujetos imaginarios, como lo es para los idealistas.

 

Allí donde termina la especulación, en la vida real, comienza también la ciencia real y positiva, la exposición de la acción práctica, del proceso práctico de desarrollo de los hombres. Terminan allí las frases sobre la conciencia y pasa a ocupar su sitio el saber real. La filosofía independiente pierde, con la exposición de la realidad, el medio en que puede existir. En lugar de ella, puede aparecer, a lo sumo, un compendio de los resultados más generales, abstraídos de la consideración del desarrollo histórico de los hombres. Estas abstracciones de por sí, separadas de la historia real, carecen de todo valor. Sólo pueden servir para facilitar la ordenación del material histórico, para indicar la sucesión de sus diferentes estratos. Pero no ofrecen en modo alguno, como la filosofía, receta o patrón con arreglo al cual puedan aderezarse las épocas históricas. Por el contrario, la dificultad comienza allí donde se aborda la consideración y ordenación del material, sea de una época pasada o del presente, la exposición real de las cosas. La eliminación de estas dificultades hállase condicionada por premisas que en modo alguno pueden darse aquí, pues se derivan siempre del estudio del proceso de vida real y de la acción de los individuos en cada época.

 

https://www.marxists.org/espanol/m-e/1840s/feuerbach/1.htm#19

 

Y así. La teoría materialista e idealista, ambas, se fueron alejando del objetivo.

 

A tal punto que unas y otras, las teorías, caen por su propio peso, han caducado, han sido declaradas falsas, no sirven.

 

Es sencillo el por qué, porque no han logrado intimidar a todos.

 

HAY PERSONAS FUERTES Y DEBILES.  No por eso dejaron de ser seres humanos.

 

Ni los castigos, físicos o psicológicos, la tortura, el sometimiento, el chantaje, que son características de estas definiciones, ninguna ha superado al ser humano mismo, al ser en si mismo, ni al tiempo ni al espacio.

 

Hay personas débiles que escapan, huyen, tienen miedo a la realidad, y se refugian en algún escaparate. [escudo], [refugio], etc., ciencia, mito, creencia, fe, religión.

 

Ojo que no he empezado a preguntar por ¿Quién creo al hombre?

 

He preguntado, ¿Quién creo el tiempo y el espacio? Me podrían contestar también, EL O LO MISMO QUE CREO AL HOMBRE.

 

Deberíamos plantear preguntas secundarias, alternativas en el hilo de la pregunta principal.

 

1.    ¿Cuáles son los elementos materiales de los que esta constituida la naturaleza del tiempo, el espacio, el ser humano y todo lo que existe en ello?

 

2.    ¿Cuáles son los elementos inmateriales que comparten estos seres?

 

3.    ¿comparten los mismos componentes materiales?

 

4.    ¿comparten la misma inteligencia?

 

5.    ¿Cómo se comunican entre sí?

 

6.    ¿las respuestas son un medio para llegar alternativamente al inventor del tiempo y el espacio?

 

7.    ¿será lógico, o natural llegar por estos medios a la respuesta correcta?

 

Yo pienso que no.

 

Yo pienso que la respuesta no es una afirmacion teorica, filosofica, logica, sociologica, religiosa, debe ser una respuesta cientifica, y mas que cientifica, debe ser real e instantanea. Dada por ese ser natural omnipresente. Pero hasta ahora no existe, ni el ser omnipresente ni la prespuesta.

 

AB. HECTOR ALCIDES RUIZ HERRERA.